Es sabido que las OSAS tienen “la exclusiva” en la crianza y educación de sus pequeños, protegiéndolos además de cualquier peligro. Las crías reciben una formación continua durante un año y medio, en el que el cuidado materno resulta vital para su supervivencia.

Gracias a una buena alimentación, y a los atentos cuidados de su madre, el crecimiento de los oseznos resulta meteórico, pasando de los 300-500 gramos que pesan al nacer, a los 20-25 kilos que alcanzan con el primer año de vida.

Como hemos visto en el vídeo, los grupos familiares son principalmente diurnos, moviéndose a cualquier hora del día. La actividad gira principalmente en torno a la búsqueda de alimento (relacionada con el elevado coste energético que supone la lactancia). En los oseznos, el juego y la locomoción constituyen la mitad de sus ocupaciones diurnas.

La alimentación tiene lugar mientras el grupo se desplaza lentamente, aprovechando los recursos disponibles en cada momento. Para ello escarban en el suelo, voltean piedras, trepan a los árboles…. En fin, cosas de osos.

PREPARÁNDOSE PARA LA VIDA ADULTA

El juego es un comportamiento muy importante en la vida de los oseznos, ya que favorece el desarrollo motor, además de sus habilidades sociales y cognitivas. El aprendizaje está vinculado a la observación, y las crías (como debe ser), imitan en todo a sus madres.

EL SEGUIMIENTO VIRTUAL DE LA OSA FIGALA

La osa FIGALA fotografiada por nuestras cámaras en el 2013

La técnica más extendida en el seguimiento de fauna, es la TELEMETRÍA. Para ello resulta indispensable la captura y manejo del ejemplar (una actividad nunca exenta de riesgo). Después, los animales son liberados provistos de un emisor (alojado generalmente en un collar) que transmite la información a un receptor. Debido a la dificultad que entraña la observación de muchas especies, esta técnica ha supuesto una auténtica revolución en el estudio y conservación de la fauna salvaje.

Pero hoy en día existen también otros métodos, menos intrusivos que el SEGUIMIENTO DIRECTO que proporcionan abundante información relacionada con la supervivencia, productividad y el manejo de las poblaciones.

El seguimiento de la osa FIGALA es un buen ejemplo de ello. FIGALA es una hembra de oso pardo asentada en el núcleo occidental de la población cantábrica, monitorizada por nuestras cámaras de fototrampeo desde el año 2012, cuando contaba unos 5 años de edad, e INDIVIDUALIZADA GENÉTICAMENTE desde el 2018.

MARCAJE VIRTUAL MEDIANTE GENOTIPOS

Mechón de pelo de oso, atrapado en una alambrada, del que puede aislarse material genético

El MATERIAL GENÉTICO que puede extraerse de las muestras de pelo o los excrementos, suele ser escaso o estar deteriorado. Aún así, los microsatélites son secuencias de ADN polimórficas, con altas tasas de mutación (por lo que son fáciles de identificar), y que varían mucho de unos individuos a otros. Analizando sus variaciones en las muestras de pelo, junto con aquellas que presentan otros marcadores genéticos, como el ADN mitocondrial, y los marcadores sexuales, podemos identificar a los osos con una alta probabilidad SIN MOLESTARLOS.

EL TRAMPEO FOTOGRÁFICO

Las cámaras de fototrampeo son otra buena herramienta para censar grupos familiares, conocer la supervivencia de los jóvenes, detectar osos con problemas, o luchar contra el furtivismo.

Ambos métodos podrían considerarse un “MARCAJE VIRTUAL”, ya que permiten individualizar a cada ejemplar y realizar recapturas, en base a la repetición de CONTACTOS FOTOGRÁFICOS y GENOTIPOS, localizados en diferentes puntos y épocas del año.

Gracias al seguimiento llevado a cabo con la osa FIGALA, sabemos que parió en el 2012, 2015, 2017, 2019, 2021 y 2022, así que este sería su sexto parto conocido.

Las osas no se reproducen en años consecutivos, pero la pérdida de su única cría a finales del mes de mayo, hizo que FIGALA volviese a entrar en celo durante el verano del 2021.

Celo de FIGALA en el primer plano y el macho PINTO en la esquina superior derecha, fotografiados el 03/07/2021

Hemos dejado atrás la época de los temidos infanticidios sin sufrir percances, y en estos momentos la familia de FIGALA permanece unida, engullendo bellotas con la habitual glotonería que acompaña a su especie. Hay que aprovechar la buena cosecha de este año, ya que será garantía de una invernada temprana, en la seguridad de la cueva, sin sobresaltos. Pero para eso,  todavía habrá que superar una dura prueba…

LAS BATIDAS DE JABALI 

La caza mayor en la modalidad de batida o montería, ha pasado de ser una actividad clandestina o residual (recogida así en la antigua ley de caza, por el perjuicio que supone para la fauna y los desequilibrios ecológicos que provoca), a ser considerada un instrumento de gestión de la biodiversidad, amparado por las Administraciones públicas.

Solo en la Reserva de Caza de Somiedo, un territorio que alberga la población osera más en alza de toda la Cordillera Cantábrica, se celebraron el año pasado 110 batidas; actividad cinegética que tiene lugar desde el 1 de septiembre hasta finales del mes de febrero, dos días a la semana.

18/09/21 (IZDA.) la osa TECHEA con sus 2 crías. 24/09/21(DCHA.) la hembra ya sin sus 2 crías

Estas dos fotografías fueron recogidas por nuestras cámaras automáticas en Somiedo, con solo 6 días de diferencia. Hasta el 18 de septiembre, este grupo familiar aparecía fotografiado en perfecto estado. A partir del 24 de septiembre, justo después de que se celebrasen  3 batidas de jabalí en esa zona, los oseznos desaparecen por arte de magia, y no vuelven a ser captados por nuestras cámaras…. lástima que en esa época del año lo de echarle la culpa a otro oso no cuele.

EL ZASCA

Curiosamente, sobre "papel mojado" se reconoce el perjuicio que pueden provocar las batidas de jabalí en zonas oseras, sobre todo cuando las evidencias cantan… como en el caso de la última OSA ABATIDA durante una cacería en Palencia. 

Y cuando todo el movimiento ecologista se rasga más o menos las vestiduras, exigiendo penas de cárcel y cuantiosas multas para el “cazador cazado” que tristemente redundarán en las arcas de quién lo propicia y consiente (en este caso la Junta de Castilla y León), la Administración asturiana se sale del tiesto, y modifica el Reglamento de Caza, ELIMINANDO la obligatoriedad de que las batidas de caza mayor se ejecuten con la vigilancia de la guardería.

Estos territorios están integrados dentro de Parques Naturales y Reservas de la Biosfera. Y en ellos,  quién sabe si por su comportamiento intachable, los cazadores solo deberán presentar la documentación pertinente, al inicio y final de las cacerías.

Pero bueno, como todo al cocer mengua, viendo la última sentencia ejemplar de la audiencia provincial de Palencia, en un caso de flagrante furtivismo en Fuentes Carrionas, en el que nos hemos visto implicados en calidad de testigo, denunciante y víctima, nos tendremos que conformar con que al furtivo se le condene a ver la película de BAMBI. Pero eso sí; aquí SIN multa ni sentencia de cárcel.

Más información sobre el caso de furtivismo en Palencia:

-FAPAS HOY. 22/01/2020

-EL NORTE DE CASTILLA. 22/01/2020

-CADENA SER. 29/09/2022